Quería hacer un recetario para mis hijos, que pudiesen ver y hacer las comidas que han conocido desde siempre, pero me animaron a hacerlo en un blog donde no solo ellos pudieran tener acceso. No cocino sólo porque hay que comer sino porque me gusta y disfruto haciéndolo. Quiero que mi cocina sea la más sana posible, basada en la dieta mediterránea. Siempre estoy abierta a cualquier innovación, propuesta o consejo. Además aprovecho este blog para hablar de otros temas del día a día.

lunes, 31 de agosto de 2015

Más cerveza y más tapas o tapones.

Como llevamos un veranito de no parar en ningún sitio fijo, nos estamos moviendo por distintas zonas e incluso más porque en nuestro barrio los mejores están cerrados. Hablando del barrio, abierto nuevamente el que tras un largo período cerrado, antiguo D90, se vuelve a abrir, no se exactamente el nombre a pesar de estar al lado de mi casa. Lógicamente había que ver como estaba y lo que allí se cocía, pues bien creo que no vuelvo a entrar al no ser por intentar dar otra oportunidad. Yo no soporto las tapas de bocadillos con trozos de carne indefinida e insípida, lo siento pero soy poco amiga de carnes y menos aún de esas, y si repites no mejoras, esta vez alones de pollo fritos, que tienen mucho éxito para según quién, pero que a mí sigue sin gustarme la carne,  poca carne y con hueso-pellejo.
Centrándome en la zona del nuevo estadio de los Cármenes que fue a donde nos desplazamos anoche. Comprobamos la cantidad enorme de bares y restaurantes que hay nuevos desde la última vez que estuvimos por la zona, hará 3-4 años. Pues la primera en la frente, Cervecería Ecu, una con buena pinta y donde empezamos la ruta.
Cerveza fría sí pero cervezón, ¡no hay manera! pero lo que realmente me dejó sin palabras fue la tapa, aquellos enormes bocadillos que iban y venían en todas direcciones sin dar tregua, rellenos de un sinfín de cosas, con col y mahonesa que no había por donde cogerlo, grande, supergrande, eso ya resultaba hasta desagradable. Estaba lleno, animado dentro y fuera pero para gente más joven, con buen saque y que con dos consumiciones se van archicomidos, para gente de mi edad necesitamos menos calorías. Mi intención es más pobre, yo aprecio menor cantidad para no saciarme sólo con la mirada y un poquito de más delicadeza y finura en la tapa, aunque sea un simple bocadillo. Por esos lares se lleva mucho lo de la tapa en bocadillo, mayor o menor pero que el pan no falta para dejar satisfecho, mejor dicho saciado. Claro después de eso no mucho más que ver (y sólo comí medio), así que volveré para conocer algún sitio más en esa zona, pero más adelante por ahora mejor me quedo en mi barrio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario