Son muchas las ocasiones en que hemos estado en este lugar, tapeando y comiendo. Siempre hemos salido bien parados y satisfechos en un término medio. Creo que han cambiado varias veces de dueño. Lo cierto es que hace unos días estuvimos con nuestros queridos compadres, tomándonos unas cervecitas y me sorprendió que tuviesen como tapa el plato del día. Precisamente ese día tenían judías con verduras, y por supuesto todos pedimos eso. Estaban suaves y ligeras pero muy acertadas. Es gratificante que entre tanta tapa de diseño y rococó, unas simples judías nos pongan de acuerdo en la misma tapa. Creo que sencillamente porque se agradece un plato de cuchara sin complicarse la vida, para que el resultado sea óptimo.
Aplaudo la sencillez y espero que sigan teniendo como tapa del día un plato típico de nuestra gastronomía de toda la vida. Muy bien. Y a ver si más de uno copia la idea.
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