Una cerveza fría

Por más que quiera tomar una cerveza bien fría en cualquier bar que voy, es imposible. Algunos SÍ tienen vasos congelados y está bien fresquita, pero en la mayoría de los bares-restaurantes NO. Deben pensar que no es tan importante, quizás para los más entendidos, pero para mí que lo que busco es una bebida fría y lo que me gusta precisamente es la caña de grifo, es lo más importante. La quiero fría. Con el verano que llevamos de calor y la de cañas que debo haber consumido, son contables los lugares donde he degustado una caña bien fría. Insisto en el tema porque es lo que realmente me gusta. Alguien me habló de una máquina menuda que congela las copas por CO2 y no las rompe ni las estropea. ¿No sería posible que todos los sitios donde se sirve cerveza la tuviesen?
La inversión es poca y el mantenimiento escaso para lo gratificante que resultaría. Además al precio que últimamente están las cañas en Granada y provincia deberían estar contemplando el asunto, y más aun, ser obligatorio e impuesto por sanidad porque una caña calentona sienta hasta mal.

Repasando los lugares visitados, de los cuales tengo comentario, a lo largo de mi trayectoria bloguera, debo decir que algunos ya no existen, otros han cambiado de dueño y otros se han reformado. El interés en decirlo es por comunicar a quien me siga en este tema y le interese mi opinión, que quizás no concuerde lo referido con el local en la actualidad.