Hemos estado en Madrid una noche porque mi marido quería ir al cumpleaños de su madre, 91 años, y aunque el viaje ha sido muy fugaz, nos ha permitido apreciar la comida del restaurante Asador Jardín de Baco, aunque en otras ocasiones me ha gustado más quizás por tomarla in situ, en esta ocasión y dado que éramos muchos incluidos niños pequeños, se decidió llevar todo y comer en casa de mi cuñada, y ya no es lo mismo. Por la noche de tapas resultó grato ver que en Madrid también van poniendo tapas, más escasas que en Granada, aunque algunas muy buenas, es todo un logro que han debido aprender al venir por Andalucía, pero a su favor vamos a decir que la caña vale más barata, por ejemplo, porque aunque pidas alguna ración siempre resulta interesante picotear algo mientras llega la comanda, las cosas buenas hay que copiarlas y mejorarlas, aquí podemos copiar los precios o equiparar con relación al tamaño tapa pero no pasarnos, que al final vamos a ser la ciudad más cara de España para tapear.
No hay comentarios:
Publicar un comentario