Este año ha sido bastante diferente a los anteriores. Muchos carritos de bebé para un piso como el mío. 8 adultos que sí, pero gente menuda que el mayor tiene algo más de 2 años.
A mi que me gusta poner muchos adornos navideños, una mesa rococó y comida variada con buena elaboración, vestirnos para la ocasión ¡ha resultado imposible!
El árbol navideño, del que se pega a la pared, se ponen y quitan los adornos para que los nietos "mayores" se entretuviesen.
Mi hija, Ángela, viendo venir el tinglado, reservó una casa rural en Monachil. Allí nos pudimos juntar con las hermanas de María, su madre y Juan, con dos carritos más de otros dos personajes.
Comida no faltó y entretenimiento con tanto peque tampoco. Pasamos el día 24 y 25. La gente joven se quedó a dormir y los mayores a casa, porque así lo queríamos también.
Entre comidas de medio día y cenas:
- tortillas de patatas
- carne en salsa
- ensaladilla con gambas
- brazos de gitano de atún con pimientos de piquillo y mahonesa y otro de paté, pavo y carne mechada
- pollo agridulce al curry
- patatas en salsa
- pizzas en horno de leña
- chorizo y morcilla a la brasa en la chimenea
- entremeses: jamón, queso, lomo en orza, patatas fritas en aceite de oliva, aceitunas, etc.
- tarta de la abuela
- dulces navideños
- bebidas
En resumen, una experiencia que ha resultado bien. En definitiva de lo que se trataba era de estar todos juntos.
Papá Noel llegó muy pronto para que los peques pudiesen estar con sus regalitos y acostarse a la hora acostumbrada, el resto tampoco trasnochamos mucho. Hay que adaptarse a las nuevas situaciones
Agradecimiento a todos los que han hecho posible que esos días hayan sido estupendos.
Buena idea 👍
ResponderEliminarSe repetirá la experiencia aún no siendo Navidad, hay fechas claves para reuniones familiares.
Eliminar