Quería hacer un recetario para mis hijos, que pudiesen ver y hacer las comidas que han conocido desde siempre, pero me animaron a hacerlo en un blog donde no solo ellos pudieran tener acceso. No cocino sólo porque hay que comer sino porque me gusta y disfruto haciéndolo. Quiero que mi cocina sea la más sana posible, basada en la dieta mediterránea. Siempre estoy abierta a cualquier innovación, propuesta o consejo. Además aprovecho este blog para hablar de otros temas del día a día.

martes, 2 de abril de 2019

Budin de limón Starbucks


Dificultad: fácil

Ingredientes
  • zumo de 1 limón
  • 1 yogur griego
  • 3 huevos
  • unas gotas de extracto de limón
  • 1 cucharada pequeña de jarabe de vainilla
  • 200 gr de azúcar 
  • pizca de sal
  • sobre de levadura
  • 150 ml de aceite (100 ml de aceite de girasol y 50 ml de aceite de oliva v.e)
  • 160 gr de harina de trigo
  • 70 gr de harina de maíz (tipo maizena)
  • 1 cucharada de aove (aceite de oliva v.e.) para untar el molde
  • glaseado: zumo de 1 limón y 4 o 5 cucharadas de azúcar glas 
  • 1 cucharada grande de kellogs integrales y 1/2 cucharada de azúcar blanca para echar por la superficie 

Elaboración
Precalentar el horno a 180º mientras hacemos el preparado. Untar un molde (tipo plumcake o rectangular, etc) con el aceite y quitar el excedente con una servilleta procurando que todo quede impregnado. En un bol se coloca el azúcar y los huevos, mezclar hasta que estén bien integrados, quedará blanquecino. Agregar el zumo de limón, extracto de limón, vainilla, yogour y aceites. Mezclar todos los ingredientes. Incorporar sal, harinas previamente tamizadas y la levadura. Se van integrando en porciones pequeñas y con movimientos envolventes hasta conseguir una crema untuosa y sin grumos.
Echar el preparado en el molde y dar unos golpecitos al recipiente sobre la encimera para evitar que se formen burbujas de aire. Espolvorear con el azúcar y kellogs por toda la superficie.
Poner el molde en el horno hacia la mitad del mismo. Dejar 45 minutos y comprobar si está bien hecho pinchando con un palillo de madera y que salga limpio. Se apaga el horno y con la puerta abierta mantener 5 minutos de reposo.
Retirar del horno y dejar enfriar totalmente antes de ponerle unos hilos del glaseado por encima, según el gusto, más o menos glaseado.
Para hacer el glaseado solo hay que poner un pequeño bol con el azúcar y agregar el zumo de limón. Podemos hacerlo más o menos espeso y consistente. A mí no me gusta una capa demasiado potente de este crujiente y la hice clarita.
Muy similar al que sirven en Starbucks con algo de mi cosecha para personalizar un poco, como el leve crujiente de kellogs y azúcar.
Lo que si puedo decir es que estaba bastante esponjoso y muy rico. En mi casa que son muy de bizcochos de chocolate, este les ha encantado, aunque en realidad me regañan cada vez que hago algún postre.
¡Operación verano en camino! No saben que aún quedan las torrijas...

PD:
Starbucks, es una cadena internacional de café. Es la compañía más grande del mundo. Nació en Estados Unidos. Entre las muchas cosas que allí encontramos está el café que se puede acompañar con uno de sus múltiples bizcochos, como el de limón similar a mi receta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario