El antiguo D'90 ha tenido varios procesos de renovación, en un último intento lo acomodaron para uno de sus hijos y realmente duró poco, no se puede tener una profesión y de buenas a primeras montar un bar pensando que cualquiera puede llevar este tipo de negocios sin más, no suele salir bien, en última instancia lo han cogido unos chicos que han empezado bien, cambiando el nombre para que no quede residuos del anterior, cambian platos e imagen, están intentando remontar el negocio y vivir de él, como la mayoría de los bares de esta zona, son bares de tapas, y en su originalidad y calidad estriba su éxito. Yo, en la medida que puedo les estoy dando oportunidad de que vayan hacia adelante, en mi barrio hay bastantes bares y me gusta ir a todos para dar vidilla a los negocios cercanos, me gustaría que el Vintage siga existiendo pero deben hacer un gran esfuerzo para contentar al cliente, no se trata de pasarse en halagos y reverencias, sino ser un profesional y actuar como tal, tener un negocio de cara al público es muy sacrificado y la rama hostelera aún más, somos muy exigentes a la hora de divertirnos, queremos todo en el momento y perfecto, sin mirar nada más, y sobre todo hay que trabajar mucho y no descuidar el más mínimo detalle. Bueno les daremos un margen de confianza, si logran superar el verano satisfactoriamente seguro que seguirán.
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