Día 1 de marzo 2015, el santo de mi hija Ángela. Ella junto con su hermana lo están pasando muy requetebién en Suiza visitando a una amiga. Yo aquí pasando una terrorífica gripe acompañada de infección de vías espiratorias que estoy más para allá que para acá. Llevo 8 días sin salir de casa y desesperada, como diría Marta Sánchez, pero lo mío por no poder respirar bien y no parar de toser. Una larga semana donde he ido tirando de congelados ante la imposibilidad para hacer nada, ¡Terrible! Nunca he estado tan mal a pesar de mi amplio historial médico. Pero hoy no podía dejar pasar este día sin hacer algo para mi pequeña y qué menos que alguna tarta-bizcocho para celebrar a distancia su onomástica. Con gran esfuerzo le dedico este rico bizcocho relleno de chocolate a mi pequeña. Con cariño de mami, muchos besos y te dejaré un trozo para mañana cuando vengas. Muchos muakkkkk.
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