Restaurante El Guerra

Son muchos años en los que somos asiduos de este restaurante y hemos visto como han ido progresando y modificando el lugar, que se ha convertido en un amplio y magnífico complejo donde ir a comer, pasar un rato, organizar alguna celebración importante y ahora en verano disfrutar de la piscina, o como nosotros vamos últimamente a tomar un platico de habas con huevos, alcachofas salteadas, croquetas de habas con bacalao o cualquier otra cosa de las que tienen de su propia cosecha, que siembran, recogen, congelan o preparan para poder tener todo el año. Lo cierto es que están buenas y salvo algún patinazo que hayan podido dar en algún momento concreto con algo no muy rico, se les puede perdonar por compensar casi siempre en positivo. Aunque las cervezas, como en la mayoría de los sitios, no están lo frías que a mí me gustan, asumido por siempre jamás, qué remedio. El pan muy rico también.